jueves, 26 de octubre de 2017




El encuentro se realizará desde el 26 hasta 30 de octubre en República Dominicana.

El encuentro se realizará desde el 26 hasta 30 de octubre en República Dominicana.


El objetivo central de la Asamblea es el de repensar desde todas las diversidades culturales de la región caribeña, una alternativa posible al modelo económico social y político del neoliberalismo.

La VII Asamblea de los Pueblos del Caribe (APC) da inicio este jueves en República Dominicana con la participación de delegados de países de toda la región.
Dominica, Antigua y Barbuda, Guadalupe, Puerto Rico, San Vicente y Granadinas, Curazao, Surinam, Santa Lucia, Barbados, Trinidad y Tobago, Jamaica, Martinica, Granada, Bahamas, Guyana Francesa, Guyana, Cuba y organizaciones sociales del país anfitrión participarán en las discusiones y mesas de trabajo que se realizarán en este encuentro.
Entre los temas prioritarios a discutir están la integración caribeña y alternativas al modelo neoliberal, lucha contra la dominación de la deuda, y consecuencias para el Caribe de la nueva ofensiva de la derecha y del imperialismo en contra de los cambios progresistas en América Latina.
Además, asuntos como el colonialismo, militarización, imperialismo cultural, racismo e identidad en el Caribe; Soberanía alimentaria, reforma agraria, cambio climático, vivienda digna, derechos laborales y lucha de los movimientos sociales y Migración también serán sometidos a la discusión.
Esta asamblea reúne los esfuerzos por la consolidación de la integración regional y la unificación de los criterios para cohesionarse a los principales espacios articuladores del continente.

"Asamblea del pueblo caribeño se reúne en #SantoDomingo contra el imperialismo y por la unidad"

La APC fue pensada como una dinámica de construcción colectiva del más amplio espectro de organizaciones del Caribe insular.
Esa amplitud incluye movimientos sociales, organizaciones de la solidaridad, sindicales, campesinas, barriales, Sin Techo, de mujeres, estudiantes, jóvenes, artistas e intelectuales, al igual que organizaciones políticas, ambientalistas, de economía solidaria, religiosas, entre otras.
Las seis asambleas anteriores fueron celebradas en Trinidad y Tobago (1994), República Dominicana (2001), Haití (2003), Cuba (2008), Barbados (2010) y Curazao (2015).

(Tomado de TELESUR)

Soñar no cuesta nada



Por Arthur González
Dice un viejo refrán español que “Soñar no cuesta nada”, y es lo que le pasa a Rosa María Payá Acevedo, refugiada política en Estados Unidos pero residente en Cuba, quien negoció ese status migratorio con las autoridades yanquis, a cambio de hacer propaganda con la muerte de su propio padre, algo que deja a las claras la ausencia de valores éticos y morales.
Para seguir las órdenes que le imparten en Miami, ahora ha convocado a un nuevo reality show, siempre empleando el nombre de su difunto padre, sin el menor pudor, que intenta atraer a jóvenes cubanos residentes en la Isla, a los que ni pagándole altas sumas de dinero ha podido captar para sus fracasados proyectos.

Recodemos que, a su llegada a Miami junto a su madre y dos hermanos, Rosa María fue conducida ante los principales miembros de la mafia terrorista anticubana, entre ellos Ileana Ros-Lehtinen, hija de un testaferro del dictador Fulgencio Batista y madrina de terroristas connotados como Orlando Bosch, Guillermo Novo Sampol y Luis Posada Carriles.
También fue presentada a Mario Díaz-Balart, hijo de quien fuera uno de los ministros más cercanos a Batista e igualmente defensor de los terroristas residentes en Florida, y para no dejar dudas del papel que tenía que jugar a cambio de su visado de “refugiada política” entregado por el Departamento de Estado, Rosa María le fue presentada al senador Marco Rubio, furibundo anticubano y asesor del presidente Donald Trump para su actual política hacia la Isla.
¿Quién puede acceder con tanta facilidad a esos congresistas si no va a cumplir tareas específicas contra la Revolución cubana?
Hasta los más tontos se percatan que no se llega a un Senador en Estados Unidos, ni por suerte ni por ser joven con cara agraciada.
Conociéndose como actúan esos personajes es muy simple entender que ahora la convocatoria lanzada por Rosa María para una segunda edición el inventado premio con el nombre de su padre, es parte de la fracasa estrategia de engatusar a la juventud cubana, algo destinado al mismo fracaso que la edición anterior y todas las tareas que le han encargado a la huerfanita, que de su padre solo se acuerda para manipularlo, algo bien demostrado en sus giras por Europa y América Latina, donde la actividad turística y las diversiones marcan su conducta, muy alejadas del pesar y la tristeza.
Supuestamente el “Premio” es para reconocer a los activistas democráticos que han mostrado un claro compromiso con la defensa de los derechos humanos en Latinoamérica, debido a que una de las medidas que diseñó la mafia anticubana en Miami fue la creación de la Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia (RedLat), y situar a Rosa María al frente del engendro, con el fin de otorgarle alguna imagen que la respalde internacionalmente.
El mayor error de cálculo de los anticubanos fue entregarle el “premio” el pasado año al Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, personaje que se sabe de sobra que es un fiel cumplidor de los dictados de Washington contra Venezuela y que no fue capaz de aglutinar a los países integrantes de la OEA para condenar a Caracas, algo que pone en tela de juicio de los jóvenes su moral y principios.
La tal RedLat, no ha condenado la muerte de Berta Cáceres, luchadora de los derechos humanos asesinada vilmente, ni tampoco se pronunció contra la detención, secuestro y asesinato del líder argentino Santiago Maldonado.
Entonces vale preguntarse: ¿Qué derechos humanos son los que defiende esa supuesta Red latinoamericana que no enfrenta ninguna de las verdaderas violaciones de los derechos humanos, condenados por decenas de miles de personas en este continente?
Es más que evidente la burda manipulación política dibujada por Estados Unidos contra Cuba, algo que perdura por 59 años sin lograr un solo resultado, pero que ha enriquecido a un manojo de mafiosos en La Florida.
Rosa María acusa al gobierno cubano del fallecimiento de su papá, pero cuando fue enviada a España para buscar apoyo de ese gobierno, el propio ministro de Exteriores y Cooperación la remitió a los tribunales para que los jueces decidieran si ella tenía razones para tal acusación, y se fue como perro con el rabo entre las patas, porque la decisión fue tajante, no tenía una sola prueba que culpara a las autoridades de la Isla. Su apelación ante el tribunal supremo obtuvo similar respuesta.
El único culpable del fallecimiento de Payá Sardiñas y su compañero Harold Cepero, fue el español Ángel Carromero, enviado a Cuba por Esperanza Aguirre, a repartir dinero a la contrarrevolución asalariada para sus actos provocativos.
Carromero conducía a exceso de velocidad, algo usual en él y por lo que le fue suspendida su licencia de conducción en España.
Una prueba de la manipulación de dicho “premio” es la lista de invitados al acto en La Habana, ciudad que supuestamente abandonó Rosa María por peligrar su vida y la de su familia y la que visita constantemente, lo que debía ser una preocupación del Departamento de Estado, pues están sosteniendo financieramente a una “refugiada política”, la cual no demuestra en la práctica dicha condición.
Esperemos por los nombres de los próximos candidatos al Premio Oswaldo Payá, pero de antemano se puede adelantar que no serán los verdaderos luchadores por los derechos humanos en Latinoamérica y si algunos de los que han quemado y asesinado a personas inocentes en Venezuela, considerados “luchadores por la libertad”.
Triste papel la de esta huérfana que vendió su alma y sentimientos, a cambio de dinero y una residencia en Estados Unidos, país que asesina, reprime y viola sistemáticamente los Derechos Humanos de los desposeídos del mundo.
Ante personas con similares actitudes dijo José Martí:
“Desconfíese de los que comercian sin miedo con las cosas santas”

Trump y Latinoamérica: ¿Quién manipula?


El senador cubanoamericano, Marco Rubio, fue quien presentó a Donald Trump en Miami y uno de las figuras que más influencieron en el cambio de la política hacia Cuba. Foto: Rainier Ehrhardt/ AP.

El senador cubanoamericano, Marco Rubio, fue quien presentó a Donald Trump en Miami y uno de las figuras que más influencieron en el cambio de la política hacia Cuba. Foto: Rainier Ehrhardt/ AP.
En política es fácil confundir la realidad con la ficción. Lo que las separa es el ego. No obstante, el ego puede ser tan grande que llega a absorber a ambas y mezclarlas en la mente de quien no controla su megalomanía. De esto resulta una personalidad parasitaria: la psicopatía. Es la sonrisa ante las cámaras, pero la risa macabra en el cuarto cerrado. Es la descomposición del ‘pathos’. El sufrimiento del alma propia, proyectado en venganza hacia los otros.
Ejemplos hay varios. El senador republicano por la Florida, Marco Rubio, es apenas uno de ellos. De él se trata este texto.
Decidido a seguir los pasos del ficcional Frank Underwood de “House of Cards”, Rubio aspira a llegar a la presidencia de los Estados Unidos mediante una serie de artilugios de manipulación. Las maniobras del senador se enfocan en descomponer las relaciones de Washington con Latinoamérica. Su más reciente capítulo: provocar el retroceso en el descongelamiento de las relaciones entre EE.UU. y Cuba.
Pero la política no es una serie de Netflix, y eso es algo que Marco Rubio ignora. Sus consecuencias no terminan al apagar la pantalla, sino que afectan la vida real de millones de personas. Así, los propósitos de Rubio no se quedan en la ficción, sino que estimulan los conflictos que tiene el gobierno de Donald Trump con Latinoamérica. Estos no son simple casualidad, sino que obedecen a la manía del senador de padres cubanos en actuar como un personaje de “House of Cards”.
Parte de la mezcla entre ficción y realidad en la conducta de Marco Rubio es que él considera que la presidencia de Estados Unidos es un escaño que puede mangonear. De hecho, alardea entre sus allegados que conoce la fórmula para obtener casi cualquier cosa de Trump.
Pero los melodramas de Rubio no son cosa de entretenimiento. Uno de quienes más padece sus efectos es el secretario de Estado, Rex Tillerson, a quien el senador parece haberle arrebatado la capacidad de manejar las relaciones de Estados Unidos con Latinoamérica ¿Ejemplo? Rubio, como uno de los más influyentes personajes en el Senado, tiene chantajeada a la Casa Blanca con proteger a Trump de las investigaciones de su vínculos con Rusia, a cambio de re-congelar las relaciones con Cuba, las cuales se distendieron bajo la presidencia de Barack Obama entre los años 2015 y 2016.
Corte A: son obvios los conflictos entre Rubio y Tillerson. Por ejemplo, hace unos días las cadenas NBC y CNN soltaron el rumor que el secretario de Estado renunciaría a su cargo por supuestamente estar harto de la conducta de Trump. Pero el funcionario salió a desmentir y en los corrillos políticos de Washington se tiene como cierto que tales rumores salieron de la oficina de Rubio, quien se lleva muy bien con ambas televisoras.
Por eso dicen mis amigos periodistas que cubren la Casa Blanca: si quieres saber la política de Trump hacia América Latina debes leer a Marco Rubio. Y algo tiene de cierto. El rompimiento de las relaciones de EE.UU. con Cuba, la escaramuza de los supuestos ataques auditivos y la expulsión de diplomáticos, el quiebre de la OEA, los ataques a Venezuela y los entreguismos de México, Argentina, Colombia o Costa Rica tienen qué ver con la manera en cómo Rubio presiona a Tillerson con el tema “Rusia” con tal de cumplir su propia agenda continental. El senador por la Florida cree que eso le llevará a la presidencia de Estados Unidos.
¿Cómo pretender conseguirlo? Hay dos pasos previos a ser candidato del Partido Republicano. Su estrategia copiada casi al calce de la usada por Frank Underwood. Paso uno, presionar la caída de Trump. Paso dos, postular a su amigo Mike Pence a la presidencia. Paso tres, postularse él como vicepresidente. Paso cuatro, hacer que caiga Tillerson y poner en su lugar a su también amigo, Mike Pompeo. Paso cuatro, preparar su candidatura presidencial.
Pero no la tiene fácil. Ya circula una carta elaborada por diplomáticos estadounidenses en la que plantean su desacuerdo en abandonar su misión en Cuba pues participaron en la normalización de las relaciones con la isla, y ven la maniobra de Rubio como un despropósito. Además, consideran a Tillerson cómo un buen secretario de Estado, con opinión propia, respetado y dueño de un vínculo propio con Trump quien le escucha y confía. Por eso les resulta extraño que Rubio tenga atribuciones que sólo competen al titular de la secretaría de Estado.
¿Logrará Rubio sus cometidos? ¿Cómo consigue manipular a Trump así? Lamentablemente no podemos adelantar los capítulos como en Netflix, para saberlo. Y es que el mundo tiene en Marco Rubio a un político disociado de la realidad, y anclado a un personaje de ficción que está arruinándole la vida a millones de familias cubanas residentes en Miami. Paradójicamente, sus propios representados. En todo caso, ellos tendrían el control –no tan remoto–, para apagar la serie y poner otra cosa. Esto ya se puso aburrido.

(Tomado de CUBADEBATE)

Revelarán hoy jueves documentos relativos al asesinato de John F. Kennedy


Foto de John F Kennedy durante el recorrido por Dallas el fatídico 22 de noviembre de 1963. Foto: AP

Foto de John F Kennedy durante el recorrido por Dallas el fatídico 22 de noviembre de 1963. Foto: AP
La última colección inédita de archivos del Gobierno de EE.UU. sobre el asesinato de John F. Kennedy saldrá a la luz de forma parcial o total.Alrededor de 3.100 expedientes oficiales hasta ahora clasificados y custodiados por los Archivos Nacionales de Estados Unidos se publicarán este jueves si el presidente estadounidense, Donald Trump, no lo impide, según lo dictado por una ley aprobada en 1992.
Trump, que el pasado sábado adelantó que permitiría que los documentos vean la luz, confirmó hoy que la “esperada publicación de los archivos de JFK (sigla de John F. Kennedy) tendrá lugar mañana“.
“¡Qué interesante!”, añadió el mandatario en un breve mensaje en su cuenta oficial de Twitter.
La inminente revelación tiene en vilo a historiadores y defensores de las teorías de la conspiración, pero la Casa Blanca ha insinuado que la publicación podría ser solo parcial: Trump podría bloquear la divulgación de algunos documentos considerados delicados por la CIA u otras ramas del Gobierno estadounidense.
“Algunos registros de esta colección no se crearon hasta la década de 1990″, y la Casa Blanca quiere garantizar que su publicación no causaría un “daño identificable” a la seguridad nacional, aseguró la semana pasada una portavoz de la Casa Blanca, Lindsay Walters, a la revista Politico.
Bajo la ley de 1992, los archivos que sean bloqueados por Trump no podrán ver la luz hasta dentro de 25 años, y quien ocupe entonces la Casa Blanca deberá decidir sobre su posible publicación.
Según varios medios, la CIA ha presionado a Trump para que mantenga ocultos una serie de documentos, quizá para esconder sus métodos o la identidad de algunos espías que podrían seguir vivos.
Pero el mandatario también ha recibido presiones para permitir la publicación íntegra de los documentos, y satisfacer así a quienes disputan la conclusión alcanzada por la llamada comisión Warren, que investigó el asesinato cometido en noviembre 1963 y concluyó que un solo tirador, Lee Harvey Oswald, fue responsable del crimen.
Roger Stone, un amigo de Trump y exasesor de su campaña electoral, aseguró el pasado viernes que había aconsejado al presidente que publique todos los documentos, sin excepción.
“Él cree en la transparencia, cree en el derecho del pueblo a saber, así que soy optimista, creo que hará lo correcto“, dijo Stone en una entrevista con el portal de extrema derecha Infowars.
Trump ha coqueteado desde hace años con teorías de la conspiración: fue él quien especuló con que el expresidente Barack Obama podía no haber nacido en Estados Unidos, y durante las primarias republicanas de 2016, Trump llegó a sugerir que el padre del senador Ted Cruz tuvo algo que ver con Oswald.
Es improbable que los archivos inéditos no contengan ningún “bombazo”, según el juez federal John R. Tunheim, que entre 1994 y 1998 encabezó un comité independiente que examinó y publicó la gran mayoría de los documentos oficiales del Gobierno estadounidense sobre el asesinato.
“Pero todo lo que se publicará mañana será interesante, porque todo lo que tenga que ver con el trágico asesinato de Kennedy lo es”, afirmó Tunheim en una entrevista telefónica con Efe.
Aunque estos son los últimos documentos sobre el asesinato que posee el Gobierno de EE.UU., aún hay información inédita en otras manos, como “entrevistas de Jackie Kennedy protegidas por decisión judicial“, archivos “de los abogados de Jack Ruby” (el asesino de Oswald) o documentos de la KGB en Moscú, explicó el juez.

(Información de EFE)